“La Abundancia de Dios en Tiempos de Escasez”

📖 2 Reyes 4:43-44 (NTV)

 “Entonces su sirviente le dijo: —¿Cómo puedo servir esto a cien hombres?

Pero Eliseo volvió a decir: —Dáselo a la gente para que coman, porque el Señor dice: ‘Todos comerán y todavía sobrará’.

Y cuando les sirvió, comieron y aún sobró, tal como el Señor había dicho.”

El Dios de lo Suficiente y Más:

En este pasaje, vemos un milagro poderoso en medio de la necesidad. Había hambre en la tierra, pero Dios, a través del profeta Eliseo, multiplicó lo poco para alimentar a muchos.

Esto nos recuerda que la escasez no limita a Dios. Donde el hombre ve falta, Dios ve una oportunidad para manifestar su poder y su fidelidad.

La abundancia de Dios no depende de las circunstancias, del dinero, ni del lugar donde estés; depende de Su Palabra y de tu fe en ella.

La Escasez No Es El Final, Es El Escenario Del Milagro:

El siervo de Eliseo miró lo que tenía —solo veinte panes de cebada— y pensó que era imposible. Pero Eliseo miró lo que Dios podía hacer.

A veces miramos nuestras limitaciones: los recursos escasos, la cuenta vacía, las puertas cerradas… pero Dios no necesita mucho para hacer algo grande.

📖 Salmo 37:18-19

 “El Señor cuida de los íntegros; día tras día ellos reciben su herencia.

No serán avergonzados en tiempos difíciles; tendrán más que suficiente aun en tiempos de hambre.”

Dios no solo promete sustento, promete abundancia en medio de la escasez.

La Abundancia Fluye Donde Hay Obediencia y Servicio:

El siervo obedeció, aunque no entendía. Él sirvió lo poco que tenía, y mientras servía, Dios multiplicaba.

Hay multiplicación en el acto de servir. Cuando das lo poco que tienes —tu tiempo, tu amor, tu ayuda, tus talentos—, Dios lo expande.

📖 Lucas 6:38

“Den, y recibirán. Lo que den a otros, les será devuelto por completo, apretado, sacudido y desbordante sobre su regazo.”

La clave no está solo en pedir, sino en creer y actuar. Dios honra la fe que se mueve, la fe que obedece, la fe que sirve incluso cuando el panorama parece imposible.

Jesús, Nuestra Fuente Inagotable:

Así como Eliseo multiplicó el pan, Jesús también multiplicó los panes y los peces (Juan 6:11-13).

El mismo poder que operó en Eliseo, opera hoy a través de Cristo en tu vida. Él no solo quiere suplir tus necesidades materiales, quiere llenar tu alma de fe, esperanza y propósito.

📖 Filipenses 4:19

 “Y este mismo Dios quien me cuida, suplirá todo lo que necesiten de las gloriosas riquezas que nos ha dado por medio de Cristo Jesús.”

Jesús es la fuente que no se agota. Cuando el mundo dice “no hay”, Él dice “habrá más que suficiente”.

Cree y Verás la Multiplicación:

Eliseo no se enfocó en lo que faltaba, sino en lo que Dios había dicho.

Hoy, el Señor te recuerda: Cree en mi Palabra, aunque tus ojos no vean todavía.

La fe abre el cielo sobre ti.

La fe transforma lo insuficiente en abundancia.

La fe convierte un desierto en un huerto.

📖 Hebreos 11:6

“Sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.”

Confía y Sirve: Cuando eliges confiar en Jesús en medio de la escasez, estás declarando que Él es tu proveedor, no las circunstancias.

Cuando eliges servir a pesar de la necesidad, estás sembrando en el campo de los milagros.

📖 Proverbios 3:10

Y serán llenos tus graneros con abundancia, Y tus lagares rebosarán de mosto.

Hoy el Señor te dice:

“No temas, porque Yo soy tu provisión. No mires lo que falta, mira lo que Yo puedo hacer. Lo poco en mis manos será mucho, y lo que hoy parece vacío, pronto rebosará de mi bendición.”

📖 Génesis 27:28

Dios, pues, te dé del rocío del cielo, Y de las grosuras de la tierra, Y abundancia de trigo y de mosto.

Oración: “Señor Jesús, gracias porque Tú eres mi fuente, mi proveedor y mi abundancia. Aun en tiempos de escasez, mi fé descansa en Ti. Multiplica lo que tengo y úsame como canal de bendición. Hazme generoso (a) en medio de la necesidad, valiente en medio del desierto y fiel para servirte aún en tiempos de dificultad que yo pueda confiar en tu sustento. Creo que mi provisión viene del cielo porque tú lo has prometido.

Amén.”

📖 Job 8:7

Y aunque tu principio haya sido pequeño, Tu postrer estado será muy grande.

Profeta Samantha Ramirez.